miércoles, 21 de diciembre de 2011

Piloto boricua no tenía golpes, solo balazo en la nuca


















El Instituto de Patología Forense descartó que haya sido apaleado, como se dijo en un principio, el piloto boricua prófugo desde el sábado cuando se hallaron 58 kilos de cocaina en su avión en el Aeropuerto Internacional de las Américas, y cuyo cadáver fue encontrado el lunes en la carretera de Higüey a La Romana.

El doctor Santos Jiménez Páez, director de Patología Forense, confirmó a elsiglo21.com que el piloto puertorriqueño Santos Seda Rodríguez, de 48 años de edad, fue ejecutado de un balazo que le penetró la región occipital y le salió por el ojo izquierdo.

El cuerpo fue entregado a la Funeraria Blandino en la tarde del martes, pero allí rehusaron incluso confirmar que será entregado a finales de la semana a su esposa Maribel Santiago Lizboa.

El doctor Jiménez Páez aclaró que el cadáver no presentaba ningún golpe contuso, sino solo la herida de bala que le penetró por la región occipital, saliendo por el ojo izquierdo.

Seda Rodríguez fue ejecutado y su cuerpo lanzado boca abajo entre matorrales de la carretera de la región oriental.
El sábado en la tarde, el piloto dueño de siete avionetas llamó a sus familiares en Puerto Rico, les dijo que había tenido “un problema” en Santo Domingo, pero que confiaran en que su nombre iba a salir limpio, según el portavoz de sus parientes, Isaac Velázquez.

La familia no supo más de él y el lunes a las 7:00 de la mañana su cadáver apareció boca abajo y tirado en un pastizal a orillas de la carretera en el kilómetro 15, antes de llegar a la ciudad de Higüey.

El Instituto de Patología Forense entregará el reporte completo sobre el cadáver del piloto boricua ejecutado, en los próximos días, de acuerdo a su director.

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