Por Jesús Camilo:
Los índices de violencia y criminalidad han aumentado considerablemente en los últimos tres años en la República Dominicana, según certificó la comisión interamericana de los Derechos Hmanos.
De acuerdo con el informe, la criminalidad se ha incrementado en un 24.9%, lo que incide sobre el deterioro de la seguridad ciudadana.
Según el informe, en el 2008 el país poseía un indice de criminalidad del 24.07%, lo que ha aumentado en los últimos tres años.
Señala que los altos índices de violencia y criminalidad han puesto en juego la seguridad ciudadana de América Latina y los pueblos de la región del Caribe, posicionándola como una de las principales demandas de la sociedad hacia las autoridades.
Califica de preocupante el hecho de que niños, niñas y jóvenes de entre 15 y 29 años se han convertido en víctimas y victimarios de los hechos criminales, elevándolo a una tasa de homicidio de 68.9% por cada 100 míl habitantes.
Al referirse a la situación, la Coordinadora residente de Las Naciones Unidas en el país, Valerie Julliand, sostuvo que la población marginada es la más propensa a la violencia y la criminalidad, como es el caso de República Dominicana, donde jóvenes habitantes en barrios marginados son los que se han convertido en victimas y victimarios.
Expresó, que la situación se debe a la falta de políticas sociales asumida por los gobiernos, los cuales, al momento de adoptar medidas lo hacen en defensa de intereses personales.
"Cuando se habla de politicas sobre seguridad ciudadana hay que poner de protagonista a los ciudadanos, muy especialmente a jóvenes menores de 34 años, ya que son estos los actores del sistema y representan un 68% en comisión del delito" sostuvo.
Recordó que el problema no es solamente de las autoridades policiales y militares, sino de la sociedad en su conjunto, porque entiende que hay que integrar al sector judicial, legislativo, educativo y a todos los actores sociales, debido a que es una problematica multicausal.
De su lado, la Representante Regional para América Central de los Derechos Humanos, Carmén Rosa Villa, afirmó que la situación no se resuelve aplicando politicas y medidas de mano dura, como endurecer penas o restablecer la pena de muerte, ya que son medidas represivas que no logran ningún efecto en la reducción de la violencia y la criminalidad.
Manifestó que la pérdida de valores agudiza la situación, por lo que consideró necesario abordar causas extructurales como la pobreza, desigualdad y la exclusión social, que permitan advertir alos jóvenes antes, y no después que delinquen.
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